jueves, 3 de noviembre de 2011

Servicios

“Que tengas un hermoso día”. Así terminó la conversación telefónica con la empleada de Alumbrado Público de nombre Ana, que muy amablemente recibió mi pedido para que coloquen nuevamente una luminaria en la esquina de casa. La habían retirado la semana pasada porque no estaba en perfectas condiciones, las gotas de lluvia provocaban algunos chispazos amenazantes para nada agradables. Al observar el poste vacío por varios días decidí hacer el reclamo. Las noches son más oscuras en medio de tanto bosque, con solo decirles que al asomar la cabeza por el costado de la casa pareciera que una pared negra oculta todo el paisaje. Lo cierto es que levantar el teléfono y ser atendido inmediatamente, sin musiquitas de por medio, saber que mis palabras fueron “escuchadas” y que la solución no tardará más de 48 horas en llegar, permite a uno sentir cierto alivio, como si las cosas realmente funcionaran. No es el paraíso, lejos está de serlo, pero tiene tanto de aquellas viejas épocas que muchos añoramos.

miércoles, 26 de octubre de 2011

El hombre mediocre - José Ingenieros

Comencé hace poco con la lectura de un libro que me recomendaron hace tiempo. El primero en hacerlo fue un profesor en la escuela de periodismo  (el bueno de Alejandro Magaldi para quienes lo conocen), y el último fue Pappo, sí, que según su biografía escrita por Sergio Marchi lo leyó en un viaje a Villa Gesell y le partió la cabeza. "El hombre mediocre" fue escrito en 1913 por el médico psiquiatra, psicólogo, criminólogo, farmacéutico, docente, filósofo y sociólogo italo-argentino José Ingenieros, que por supuesto se destacó también como escritor. Todavía no llegué ni a la mitad, pero ni bien comienza el libro dice lo siguiente y me parece digno de ser compartido.

"Cuando pones la proa visionaria hacia una estrella y tiendes el ala hacia tal excelsitud inasible, afanoso de perfección y rebelde a la mediocridad, llevas en ti el resorte misterioso de un Ideal. Es ascua sagrada, capaz de templarte para grandes acciones. Custódiala; si la dejas apagar no se reenciende jamás. Y si ella muere en ti, quedas inerte: fría bazofia humana. Sólo vives por esa partícula de ensueño que te sobrepone a lo real. Ella es el lis de tu blasón, el penacho de tu temperamento.
Innumerables signos la revelan: cuando se te anuda la garganta al recordar la cicuta impuesta a Sócrates, la cruz izada para Cristo y la hoguera encendida a Bruno; cuando te abstraes en lo infinito leyendo un diálogo de Platón, un ensayo de Montaigne o un discurso de Helvecio; cuando el corazón se te estremece pensando en la desigual fortuna de esas pasiones en que fuiste, alternativamente, el Romeo de tal Julieta y el Werther de tal Carlota; cuando tus sienes se hielan de emoción al declamar una estrofa de Musset que rima acorde con tu sentir; y cuando, en suma, admiras la mente preclara de los genios, la sublime virtud de los santos, la magna gesta de los héroes, inclinándote con igual veneración ante los creadores de la Verdad o la Belleza.
Todos no se extasían, como tú, ante un crepúsculo, no sueñan frente a una aurora o cimbran en una tempestad; ni gustan de pasear con Dante, reír con Moliére, temblar con Shakespeare, crujir con Wagner; ni enmudecer ante el David, la Cena o el Partenón. Es de pocos esa inquietud de perseguir ávidamente alguna quimera, venerando a filósofos, artistas y pensadores que fundieron en síntesis supremas sus visiones del ser y de la eternidad, volando más allá de lo real. Los seres de tu estirpe, cuya imaginación se puebla de ideales y cuyo sentimiento polariza hacia ellos la personalidad entera, forman raza aparte en la humanidad: son idealistas".

lunes, 24 de octubre de 2011

Participación en Time Killer, Capítulo XIII

Sucedió hace minutos nomás, una nueva emisión de Cuentos Deportados realizada por quien aquí escribe. En esta oportunidad después del tema musical pueden disfrutar uno de los momentos sublimes que tuvo el episodio 34 de Time Killer (FM Simphony 91.3Mhz), en el cual tanto Julián como Gustavo cuentan sus encuentros casuales con emblemas de la música mundial...


"Madrugar. Madrugar en serio. No pensar y salir. Calles desiertas. Crujidos de hojas que acompañan sus pasos. Es el momento justo en que no se encuentra a la luna ni al sol. Hay una claridad confusa. Cantan los primeros pájaros, la ciudad aún duerme. En pocos minutos comenzará la rutina y el caos, pero a esta hora él es él. Se siente único, omnipotente. Nadie puede quitarle este instante, este regalo, este presente. Sabe que más tarde será uno más de camisa y corbata del montón, pero ahora no, ahora es el dueño de sus deseos en los que nadie interfiere. Y trota, y corre y recorre kilómetros sin destino, aunque sepa que su destino será un círculo que lo deposite nuevamente en el punto de partida. Y así entrena día tras día, madrugada tras madrugada, y se libera. Y cuando lo hace se imagina el mañana, y dibuja en su mente un estadio lleno y él en la pista, corriendo y logrando entrar en el medallero, enarbolando la bandera de su país con lágrimas en los ojos, sin obtener ni pedir nada a cambio, nada más que el orgullo y la gloria personal de haberlo alcanzado".

Patricio Rey y sus redonditos de ricota - Vencedores vencidos

Y ahora tiro yo porque me toca
en este tiempo de plumaje blanco,
un mudo con tu voz, y un ciego como yo,
vencedores vencidos!

Te has fugado!
Me hago humo!
Den la alarma!
Ensayo general para la farsa actual,
teatro antidisturbios.

Se rompe loca mi anatomía
con el humor de los sobrevivientes,
de un mudo con tu voz,
de un ciego como yo,
vencedores vencidos!

Leyendo diarios de hoy, un baño turco,
empañando Ray-Ban's, mascando un hueso,
tu perro, un perro cruel,
con la costumbre de no contentarse con los restos.
Ovejero que descansa en manto negro.

Ensayo general para la farsa actual,
teatro antidisturbios.

En este rollo de monos de polvo
hemos perdido el rastro unos minutos,
un par de monos más (unos terrícolas),
vencedores vencidos!

Buena Suerte! Y más que suerte! (sin alarma...).
Me voy corriendo a ver que escribe en mi pared
la tribu de mi calle.
La banda de mi calle!

domingo, 23 de octubre de 2011

Contradicciones

A los que verdaderamente no termino de comprender son aquellos tipos que se la pasan vaticinando el fin del mundo. El caso más reciente fue el del predicador estadounidense Harold Camping, que había puesto como fecha límite el pasado viernes 21 de octubre. ¡Sorpresa! ¡Hoy domingo 23 estoy escribiendo estas líneas y vos las estás leyendo! ¿Qué buscan estos señores? Si la respuesta es fama, la consecuencia siempre va a ser efímera. Porque supongamos que alguna vez tengan razón y acierten su pronóstico, van a ser conocidos por todos durante los pocos días que estemos vivitos sobre esta tierra. Y caso contrario, como sucedió en el ciento por ciento de los casos, no dar en el blanco les vale el título de mentirosos, y sus predicciones pasan a tener un valor nulo de ahora en adelante...

sábado, 22 de octubre de 2011

Participación en Time Killer, Capítulo XII

Esto sucedió el lunes pasado, pero olvidé asentarlo y compartirlo aquí en el blog. El audio corresponde al progama que se emite por FM Simphony 91.3 todos los lunes a las 18hs.

  Cuentos Deportados - Cap VII by SebasL 


"El lunes pasado Cuentos Deportados no salió al aire, ¿y saben por qué no salió? Porque era el episodio número 32. ¿Y saben quién se identifica con el 32? Carlitos Tevez, que semanas atrás no quiso entrar a jugar un partido por la Liga de Campeones. Y nos sentimos como él, con la 32 en la espalda, por eso nos negamos a salir a la cancha. Y nos bancamos la que se venga. Que el público prenda fuego pancartas con el logo de Cuentos Deportados. Que el productor inicie una persecución para excluirnos del programa. Que nos callen, que nos censuren, que intenten imitarnos, pero sepan que jamás lograrán igualarnos. Ahora, de suceder esto y que no volvamos a salir al aire, estaremos orgullosos de habernos presentado en este episodio, el 33. No sé, se me vienen a la mente los 33 orientales, que no es el nombre de una calle así porque sí, sino que son los 33 tipos que lograron la independencia de Uruguay; también por supuesto los 33 mineros que zafaron hace poquito más de un año tras quedar atrapados 700 metros debajo en tierras chilenas. O el álbum de Luis Miguel titulado 33, publicado en 2003 y del cual muchos en este programa son fanáticos. Por qué no la línea de colectivos 333, de San Isidro a Olivos y Olivos a San Isidro incansablemente. Pasaron 33 años desde que ganamos el primer mundial de fútbol. Y dentro de poco van a cumplirse 33 años desde que llegué al mundo, para alegría de todos ustedes... Y de los médicos, por supuesto. “Diga 33”, ¡cuántas veces lo habremos escuchado! El caso más llamativo en mi experiencia es el que sucedió ya tres veces con mi suegro. Sí, es médico. Y tiene tres hijas. Y a los tres novios de sus hijas, o sea a sus yernos, en algún momento de la vida les tocó decir 33 frente a su suegro. Lo particular es que el resultado siempre fue el mismo, y a los tres los mandó a hacerse una colonoscopía. ¿Existirá alguna explicación científica para ese peculiar desenlace? Por mi parte pude transar con el gastroenterólogo, con mis cuñados no sé qué pasó. Y como todo tiene que ver con todo, se me ocurrió pegarle a este relato el tema "I wanna be sedated", de los Ramones, que justamente salió publicado en el disco "Road to ruin" hace 33 años, y porque de la endoscopía no zafé y en lo único que pensaba era en que quería estar sedado…"

jueves, 20 de octubre de 2011

Vecinos

Pasaba en su moto por la puerta del negocio casi todos los días. Iba y venía constantemente, con su casco bien calzado y sin levantar alta velocidad. Siempre solo, sin destino cierto, acompañado por el rugido de un motor que llamaba la atención pero no causaba molestias. Un día apareció a pata. Despacito, como quien no quiere la cosa, entró curioso al local. Saludó, observó, sonrió y entabló una conversación. A partir de allí pasa siempre alrededor de las cinco de la tarde y levanta su mano, firmando el presente de cada día. Lucas tiene ocho años, va a tercer grado turno tarde de la primera escuela estatal de Pinamar y vive justo a la vuelta de mi trabajo. “Sólo bajo a la calle para encenderla o calentar el motor, pero manejar, siempre por la vereda”. Conoce a todos en el barrio y todos saben de él. Es capaz de hacer quince preguntas en un minuto o quedarse callado quince minutos. Todavía no sabe qué quiere ser cuando sea grande, pareciera preferir continuar disfrutando su niñez.

sábado, 8 de octubre de 2011

Cambios

Si mi madre abrió una cuenta en la red social Facebook y puso su apellido de casada, ¿por qué mi mujer puso el suyo de soltera? Signo de muestra de cambio en los tiempos. El ejemplo de mi señora se puede ampliar a toda la generación de mujeres modernas (acordes con el tiempo actual, avanzadas en sus características, ideas, usos y costumbres), no se estila más hacerse conocer por el apellido de casadas. Creo que todos aquellos que conocen a mi madre la llaman por el apellido de mi padre, y así con la gran mayoría de madres de mis amigos de las cuales desconozco sus apellidos originales. No está bien, no está mal, es así, y en algún punto algo me llamó la atención, sino no lo hubiese escrito aquí.

martes, 4 de octubre de 2011

Confidencias musicales

En mi casa no había un piano. No pasé mi infancia entre discos de vinilo, ni tampoco teníamos fonola. No sonaban tangos, ni siquiera recuerdo sonidos ambiente de radio alguna. Llegan a mi memoria (que no suele ser una fuente fidedigna) tres cassettes que mis hermanas adquirieron cuando comencé a prestarle atención a la música: ‘Más cerca de la vida’ de César Banana Pueyrredón, ‘Yo te avisé’ de Los Fabulosos Cadillacs y ‘Joyride’ de Roxette. Sí, así me inicié en la música. Nada de Beatles, Floyd, Purple, Stones ni AC/DC. Tampoco Serú Girán, Gieco ni Abuelos de la nada. No sé de dónde saqué esta necesidad, pero hoy no puedo estar sin música. Dediqué mi adolescencia a disfrutar shows de grupos que ganaban popularidad con sus primeros estadios como Los Piojos y La Renga. Y de ahí a viajar hacia atrás en el tiempo, a investigar por qué estas bandas eran lo que estaban llegando a ser, sus influencias, sus antecesores. A imaginarme el contexto en que cada disco era grabado, a situarme en cada década para intentar comprender las obras en su integridad. Fue hace pocos años, fue hace mucho tiempo. No existía internet, y por ende tampoco google ni descargas de archivos en formato ‘emepetres’. Desperdicié cantidad de visitas internacionales en los ’90 por mi falta de cultura musical, aunque un poco de eso pude remediar en los últimos tiempos. Disfruto innumerables interpretaciones en castellano, escuchando a aquellos que en sus letras dicen cantidades de frases y palabras que me hubiesen gustado escribir. Al inglés supe mantenerlo apartado hasta que me sentí maduro para entenderlo, y es el día de hoy que continúo conociendo bandas y artistas grandiosos de todos los tiempos. Me alegro cuando puedo ser partícipe del progreso de grupos a los que acompañé desde sus comienzos, me llena de satisfacciones ver al público que asiste a los conciertos. Es cuestión de abstraerse por un instante del recital y mirar hacia los costados, todos unidos por la misma causa, todos tratándose por un rato como miembros de una gran familia. Hoy considero ser poseedor de una apertura mental necesaria para saborear casi todos los estilos en su tiempo y forma, aun sabiendo que queda mucho por ser descubierto. Pudiendo elegir entre tantas frases para terminar este texto, finalmente decidí resumirlo en este pedacito de estrofa del tema ‘Juntos’, de Pampa Yakuza: ‘Ritmo, inspiración, navegando al interior, como son todos los días, siete notas en busca de la armonía’.

Simplemente Pappo

El libro ‘Pappo, el hombre suburbano’ (Editorial Planeta, 540 páginas) cuenta la biografía del músico con una minuciosidad exquisita. El autor, Sergio Marchi, deja en claro que no le resultó fácil al Carpo lograr ese reconocimiento que finalmente adquirió en nuestro país. Un eximio guitarrista que comenzó a rodar en los ‘60 pero que logró seria aceptación popular a principios de los ’90, incluso llegando a muchas casas a través de una canción que le pidieron interpretara para el programa de Tato Bores y que tenía como protagonista a la jubilada Norma Plá en su confrontación con Domingo Cavallo. ¿El tema? ‘Mi vieja’, que Pappo detestaba y no quería incluir en el disco ‘Blues local’. Para meter esa canción, los productores tuvieron que pagarle al músico veinte mil dólares más para convencerlo. El libro permite recorrer la vida de Norberto Napolitano por completo, narrando anécdotas como la que a continuación decidí transcribir.

“... Conversando, el negro prometió encontrarlos al otro día en un bar de blues donde iba a ver si podía hacer que Pappo se subiera a zapar con quien tocaba esa noche. Los cita en un lugar ubicado en South Central, un barrio donde ningún blanco debe poner su pie si es que aprecia su integridad, y ellos llegan en lo que llaman el “gronchomóvil”, blanco y con tazas doradas. Estacionan cerca y viene un enano que lo encara a Peter.

- ¡Hey, señor! Por veinticinco centavos le cuido el auto – le propone el diminuto ser.
- ¿Y a vos quién te cuida? – le dice Peter sacando el estuche del baúl.
- ¡Esta! – contesta el enano abriéndose el saco y mostrando una Smith & Wesson.
- Bueno, te doy dos dólares y cuidá todo lo que quieras.

‘El enano por poco nos entra a upa al bar, no podía creer que le diera dos dólares’, se ríe Peter. La diversión finaliza apenas traspasan la puerta: todos negros y ellos, que parecen brillar en la oscuridad, atraen todas las miradas. La banda que toca esa noche se llama Balls of fire. ‘Tengo que tocar acá Shorthorn’, lo apura Pappo. En la oscuridad, Peter divisa al armoniquista de la noche anterior que le hace señas de que espere. El tipo va y habla algo con el tecladista de la banda, que asiente con la cabeza.

- ¡Argentina! ¿Trajiste tu guitarra? – pregunta el armoniquista.
- Sí, sí, acá la tengo – dice Pappo, abriendo el estuche.
- Apurate que te van a dejar tocar.

Pappo pela la SG y se encamina al escenario. En el trayecto, un viejo negro lo mira como miran los diablos y le dice: ‘Pibe, no hagas nada mal o sos carne muerta’. Peter esperaba a Pappo muy cerca de la puerta, con el estuche listo por si había que salir corriendo. El tecladista parece amistoso, y le sonríe a Pappo. El cantante, un tal Bobby Phillips, no. Y dice: ‘Un momento. Acá hay un tipo que viene de Argentina, no sé dónde queda eso, es más, no me importa. El tipo dice que puede tocar los blues. Pero hay un problema: es blanco’. Silencio. Peter comienza a preparar las piernas para correr. La banda arranca con ‘Sweet home, Chicago’. Pappo no mueve ni un músculo. El tecladista le hace señas como para que meta algún fill. El cantante entona la primera estrofa: ‘Come on, baby don’t you wanna go…’, y cuando la termina dice: ‘ Desde Argentina, mostranos qué tan bien podés tocar los blues’.

‘Y salió Maradona a la cancha y la descosió’, asegura Peter. ‘De pronto una gorda se paró, comenzó a mover el culo, se pararon todos y ya está. Lo ovacionaron’. Una vez terminado el show, Pappo recibió felicitaciones de todos los músicos, y una amplia sonrisa y un fuerte abrazo del negro que tocaba el órgano. Su nombre era Deacon Jones y Pappo no sabía que había encontrado a un hermano del blues.

viernes, 30 de septiembre de 2011

Humor suicida...

Junto al cadáver de un suicida se encontró una carta explicatoria diciendo:
"No se culpe a nadie de mi muerte. Me quito la vida porque dos días más que viviese sería mucho martirio: Tuve la desgracia de casarme con una viuda. Esta tenía una hija. De haberlo sabido, nunca me hubiera casado con ella. Mi padre, para mayor desgracia, era viudo y se enamoró y se casó con la hija de mi mujer. De manera que mi mujer era suegra de su suegro. Mi hijastra se convirtió en mi madrastra y mi padre al mismo tiempo era mi yerno. Al poco tiempo, mi madrastra trajo al mundo una niña que era mi hermana, y a la vez era nieta de mi mujer, de manera que yo era abuelo de mi hermana. Después, mi mujer trajo al mundo un niño que, como era hermano de mi madrastra, era cuñado de mi padre, nieto de su hermana y mi tío. Mi mujer era nuera de su hija, yo soy en cambio padrastro de mi madrastra, y mi padre y su mujer son mis hijastros, mi hijo es mi bisnieto y tío de su tía. Además, yo soy mi propio abuelo. En fin, me despido de este mundo porque no sé quién carajo soy".

(Texto que llegó vía mail a la casilla de mi madre, si es que es mi madre, porque creo que terminé por confundirme yo también).

martes, 20 de septiembre de 2011

Por estos días...

Mucho sol. Poco viento. Menos frío. Jardín verde, de a poco floreciente. Aire puro. Pinocha. Rastrillo. Pelota de fútbol. Pelota de rugby. Playas vacías, placenteras. Gaviotas. Pescadores. Más día. Menos noche. Más turismo. Más visitas. Compañía. Libros. Música. Películas para niños. Muchos niños. Risas. Sonrisas. Diversión. Buen humor. Trabajo. Paciencia. Optimismo, siempre. Ilusión... Lo mejor está llegando.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Poder Judicial, algo no funciona

No me lo contaron, me sucedió a mí. Ayer nomás, y todavía no salgo de mi asombro. Será porque es una situación que no se vive con frecuencia en el común de la gente, y quizás para los involucrados que se desempeñan allí es moneda corriente. Cortito y al pie, me pidieron que sea testigo en un juicio laboral, para lo cual viajé casi 400 kilómetros, y luego de tres horas de espera (literalmente) la audiencia no se llevó a cabo porque uno de los tres jueces que integran el tribunal en San Isidro se jubiló hace algunas semanas atrás y no consiguieron un reemplazo para su puesto. No comprendo nada del tema y algún entendido podrá corregir lo recién escrito, pero los hechos así sucedieron y emprendí el viaje de regreso con la sensación del tiempo mal gastado (familiares abstenerse a las quejas, hablo del tiempo en tribunales, no del día entero). Si en un caso tan simple como debería ser este, la justicia actúa de esta manera, debo convencerme de que algo no funciona correctamente...

miércoles, 31 de agosto de 2011

Pequeñas cosas de la vida

¡Cuántas ganas me dan de hablar con alguno! Tanto para preguntarles. ¿Cuántos serán en total? ¿Quién el más viejo? ¿Cuál el más alto? Ante la posibilidad de la falta de respuesta y encima de estar siendo observado por alguien, por las dudas me quedo en el molde. Pero es que llaman tanto la atención. Tendrían que verlos, pero verlos en serio, observarlos. Siempre firmes sin importar las condiciones climáticas, de diversas especies, colores y tamaños. ¡Los tamaños! Ahí nomás, en la parte trasera de casa, hay uno que tiene alrededor de un metro y medio de ancho, impone un respeto con su sola presencia que mejor ni te cuento. Y ni hablar al mirar hacia arriba, pareciera no terminar nunca. Hoy caminaba temprano y los veía serenos, uno al lado del otro decorando cuadras y cuadras, tanta historia tras ellos. Nunca terminarían un censo, si hasta son capaces de escondernos de esas modernas imágenes aéreas con la cantidad de copas frondosas que forman entre todos. Y pensar que para algunos pasan inadvertidos, vaya uno a entender…

martes, 30 de agosto de 2011

Participación en TK, Capítulo X

El siguiente cuento pudo escucharse al aire durante la emisión de Time Killer del día de ayer, a través de FM Simphony 91.3Mhz. Para escuchar el programa entero y acompañar a Julián, Paula, Gustavo y Ana, , click acá. En la sección Cuentos Deportados, una breve historia sobre sorteos, premios y la suerte que los acompaña...




Cuentos Deportados - Cap X by SebasL

"¡No, no te das una idea! Entendés que justo él salió favorecido entre millones, él que nunca había ganado nada en su vida, que ni siquiera mandó la carta sino que lo hizo su novia porque escuchó de refilón el sorteo en la radio y se acordó que a él este tipo le gustaba. Imaginate, una cena entre él y su ídolo máximo, solos, para charlar al menos una hora y media solos. Claro, éste enseguida empezó a maquinarse, que le iba a preguntar por aquél partidazo impresionante en el que se jugó todo y la dejó chiquitita, aquél del gol al ángulo desde media distancia, sí, ese que dejó a todo el estadio enmudecido. O por aquella vez en que se peleó cara a cara con el inglesito morochito que le había ido fiero con los dos pies para adelante, sí, que le dijo de todo y cuando el tipo se le puso encima le sacaba como dos cabezas. Si hasta le iba a plantear por qué fue para atrás contra los primos, porque esa le quedó atragantada, justo contra los primos y a este se le ocurrió esconderse los noventa minutos, que decían por ahí que lo habían apretado en la semana… Todo tenía planeado, no se iba a guardar nada, solos en una cena íntima durante una hora y media por lo menos, porque si era por él la iba a estirar hasta la madrugada. ¿Que qué pasó? El boludo estaba tan nervioso antes de ir para el restorán que se tomó un calmante, pero si será tan nabo que no leyó el papelito que traen los remedios y se mandó una pastilla entera, era tan fuerte que se quedó dormido manejando para el boliche, se la puso contra un patrullero. Hasta que salió del hospital y de la comisaría pasaron como seis horas, solito volvió a su casa, y la novia ni bien se había enterado del accidente llamó a los del sorteo y la convencieron para que aprovechara el premio, sí, ésa que salió en la revista del otro día, la nueva botinera del momento, algo así creo que decía. Y bueno, el tipo nunca había ganado un sorteo…"

Y para concluir esta historia, un tema de Los Rodríguez llamado Mala Suerte, que dice así:

El jugador en la esquina con su caramelo,
hoy no durmió, en el sueño tenía celos.
Casi tiene su corazón prisionero,
afortunado en el amor (mala suerte en el juego).
El jugador juega con el que quiera jugar,
puede perder pero vuelve pensando que pudo ganar.
Puede jugar la noche y el día entero,
afortunado en el amor (mala suerte en el juego),
afortunado el jugador (mala suerfe en el juego).
Y en lugar de volver a su casa,
tuvo que quedarse y saber que pasa:
Cuando el aire se convierte en viento,
el jugador se juega un sentimiento.
El jugador se juega sus botas en este momento.
Afortunado en el amor (mala suerte en el juego).
(Afortunado el jugador...).
El jugador se dobla pero no se rompe,
casi empeñó su corazón traicionero.
Casi lo apuesta todo y se queda con cero,
afortunado en el amor (mala suerte en el juego).
¿Dónde estará jugando por la mañana?
Piernas de mujer duermen en su cama.
No importa si en el viento se vuela un sombrero,
afortunado en el amor (mala suerte en el juego).
Afortunado el jugador...

miércoles, 24 de agosto de 2011

Sobre colecciones y concursos

Cuando escuché que el premio del concurso era “un té para dos personas”, enseguida pensé: ¿no podrían ser al menos dos té? ¡No sean tacaños! ¿Qué tendrían que hacer, primero preparar uno, secar el saquito al sol y luego preparar el segundo? Lo mismo me sucedió en la publicidad siguiente. ¿Para qué quieren un tenedor aquellos que compren la colección de la Historia Universal que viene con el diario? Es que el locutor lo dijo claramente, “con el primer fascículo, estuche contenedor de regalo”. No lo entendía muy bien. Al igual que el famoso caso de los cordobeses y los mendocinos, ¿qué pasa si unos u otros ganan un sorteo estando fuera de sus provincias originales? ¿Les retienen el premio? ¡Cambienmé el domicilio! No sé, por las dudas ni participo, después de todo nunca gano y lo de la historia ya pertenece al pasado…

martes, 23 de agosto de 2011

Participación en TK, Capítulo IX

Volvimos, a la distancia, a participar en radio. Precisamente fue la sección Cuentos Deportados la que se pudo escuchar ayer lunes en Time Killer, con Julián, Paula y el pequeño gigante Tom haciéndoles el aguante. Para disfrutar el programa entero, click acá, para la participación de quien escribe, Play en el reproductor...


Cuentos Deportados - Cap IX by SebasL

"Él no quería ser lo que es. Lo afirmo y lo sostengo y que alguien se atreva a demostrar lo contrario. Sus sueños eran grandes, ¿pero pretendían llegar a tanto? “Primero jugar un Mundial, y segundo salir campeón”. Lo dijo cuando era un purrete, un chiquilín de potrero, como si de una premonición se tratase. Increíblemente alguien lo filmó manifestando esas palabras, y todos alguna vez tuvimos ocasión de verlo y escucharlo. Y resultó que los cumplió a esos sueños, y de una manera brillante e inolvidable para el planeta fútbol entero. Pero después… el problema fue el después. Porque quizá si lo dejábamos él se quedaba en el molde, a pesar de su personalidad extravagante. Pero ni siquiera lo intentamos. Lo buscamos, lo rodeamos, le dimos micrófonos y altoparlantes, lo arrinconamos en cada lugar posible y buscamos la foto a su lado incansablemente. Alimentamos a esa bestia que creció hasta dimensiones infinitas y nos aferramos a sus manos buscando la gloria que alguna vez supo ser, pero que ya no es. Si se veía tan feliz gambeteando y pateando esa pelota una y otra vez, con la camiseta que fuere, desde Cebollita hasta albiceleste. Pero no pudimos con nuestro genio, el del argentino recurrente que busca ídolos multifuncionales y termina a veces incluso detestando a los que no cumplen correctamente. Él tan solo quería ser lo que era, pero entre todos, de a poquito y rápido a la vez, lo llevamos a ser lo que es."

Luego de las palabras del Diego pibe, aquél que soñaba ser mundial, y tras saborear otra vez más el relato de Víctor Hugo Morales en el que aún hoy es considerado por muchos el mejor gol de la historia, pegadito nomás llega Manu Chao y su canción La vida tómbola, que dice así:

Si yo fuera Maradona
viviría como él ,
si yo fuera Maradona
frente a cualquier portería.

Si yo fuera Maradona
nunca m'equivocaría,
si yo fuera Maradona
perdido en cualquier lugar.

La vida es una tómbola...
de noche y de día...
la vida es una tómbola
y arriba y arriba....

Si yo fuera Maradona
viviría con él,
... mil cohetes... mil amigos
y lo que venga a mil por cien...

Si yo fuera Maradona
saldría en Mondovision
para gritarle a la FIFA
¡Que ellos son el gran ladrón!

La vida es una tómbola...
de noche y de día...
la vida es una tómbola...
y arriba y arriba....

Si yo fuera Maradona
viviría como él,
porque el mundo es una bola
que se vive a flor de piel.

Si yo fuera Maradona
frente a cualquier porquería
nunca me equivocaría...

Si yo fuera Maradona
y un partido que ganar,
si yo fuera Maradona
perdido en cualquier lugar...

La vida es una tómbola
de noche y de día...
la vida es una tómbola...
y arriba y arriba....

sábado, 20 de agosto de 2011

Imprevistos

Mientras sostenía el café en una mano, con la otra corrió la cortina de la ventana para admirar el día. Un sol espléndido, de esos que invitan a caminar bajo su manto. Así se dispuso entonces, a pesar de la advertencia del frío polar que se iba a instalar esa mañana y al cual estaba presto a afrontar. Eran diez cuadras hasta el trabajo, no sería exagerado el esfuerzo. Subió la barranca hacia la primera esquina, ahí arriba se enteró que lo del frío era acertado, iba en serio. En la tercera cuadra las espesas nubes grises ya habían cubierto el cielo por completo, sin dejar rastro de aquél sol que por unos instantes lo estuvo acariciando. Cuando cruzó la sexta intersección de calles comenzó a sentir unas pequeñas gotas sobre su cuerpo. Miró hacia arriba, venían directamente congeladas a punto de transformarse en trozitos de hielo. Se sonrió, recordó la letra de una canción y tarareó "que las gotas no duelen". Pero faltaba aún para llegar a destino, y cuando su frente de a poquito a poco manifestó sufrimiento por la combinación del agua y el frío apuró sus pasos en busca del imperioso refugio, al que finalmente arribó estoico. Una ventana puede mostrar la realidad en forma parcial, concluyó, y se prometió intentar mirar el panorama completo en la toma de futuras decisiones…

sábado, 6 de agosto de 2011

Los desequilibristas

Todos, absolutamente todos, con práctica, perseverancia y voluntad deberíamos poder caminar sobre una soga sostenida a unos centímetros del suelo sin caernos. Claro que casi ninguno de nosotros lo intenta, entonces cuando encontramos a alguien que sí lo hace nos gusta sorprendernos. Conclusión, los equilibristas son minoría. Y el resto, “los desequilibristas”, nos encargamos en muchas oportunidades de soplar fuerte desde un costado para intentar voltearlos. Porque sincerémonos, ¿qué espera ver la gran mayoría cuando el hombrecito allá arriba llega a la mitad del recorrido, que lo concluya o caiga al vacío? Esto pensaba anoche, cuando me dispuse a ver un programa de televisión en el cual estaba invitado un grupo musical amigo. Me refiero a “678”, emitido por la Televisión Pública. Para este ciclo, todo es color blanco cuando se debaten temas oficialistas, y gracias al archivo y al poder de las ediciones dejan muy mal parado a todo aparato opositor. En contraposición están el resto de los analistas políticos, con la señal TN y el Grupo Clarín como principales referentes y para quienes todo es color negro cuando de examinar al actual Gobierno se trata. Son muy pocos aquellos equilibristas que ejercen un periodismo objetivo sin el intento de marcar tendencias. Una lástima, uno de los principios fundamentales en la profesión. Difícil se hace entonces para el espectador entender en qué creer, y ahí nace la necesidad de una sociedad educada, coherente y que sepa pensar por sí misma, por supuesto una utopía en estos tiempos. Hay tanta tela para cortar que este texto podría convertirse en un libro. Es que me resultó triste el encontrar en una red social las críticas de los seguidores de esa banda musical amiga, muchos de ellos a disgusto y otros a favor de su participación en el programa oficialista, discutiendo cual hinchas del fútbol tercermundista que no aceptan al prójimo por actuar distinto. No sé ustedes, pero ya opté hace rato dejar de soplar fuerte, practicar e intentar una y otra vez dar pasos sin caer, difícil por cierto. Buscando ese equilibrio que me autorice ser parte de una minoría que quiere ser mayoría, y permitirme soñar con encontrar algún día una generación que no se degenere, y esa utopía antes mencionada se convierta en una linda realidad, por más cursi que suene.

Cursi: adj. y com. Que pretende ser elegante o refinado sin serlo, resultando ridículo.

viernes, 29 de julio de 2011

El principio

Aves de patas largas con cuellos largos y delgados amanecen en el jardín, toda una novedad para alguien que siempre vivió en departamentos. Seis cuadras hacia un lado, el mar, diez en dirección opuesta, el trabajo. La ciudad está desierta cuando salgo temprano, aunque el reloj indique que en realidad no es tan temprano. Y vuelve a descansar cuando el sol anuncia el mediodía, para que el almuerzo pueda acontecer en familia. No es el paraíso, lejos está de serlo, pero tiene mucho de aquellas viejas épocas que tantos añoramos. Hay tranquilidad y movimiento, ¡chicos jugando al aire libre! Trámites rápidos y hasta la sucursal de un banco sin custodia, impensado en estos tiempos. Ilusión, incertidumbre, y un sueño cumplido que ahora hay que alimentar y sostener con hechos.

jueves, 2 de junio de 2011

Participación en El Tercer Fantasma, Capítulo IV

Hete aquí el segmento de Mick Richards emitido durante la última edición del Tercer Fantasma por FM Simphony 91.3Mhz. Un viaje atrás en el tiempo recorriendo sucesos musicales que acontecieron en una semana como esta, con el debut de un grupito nacional sobre los escenarios incluido.

Y mientras subía este post pude darme cuenta que borré el archivo con el texto del audio, motivo por el cual los invito a escucharlo y disfrutarlo atentamente, ya que su edición no tiene desperdicio alguno...

martes, 31 de mayo de 2011

Participación en Time Killer, Capítulo VIII

Una nueva aparición del segmento Cuentos Deportados dentro del programa Time Killer, en FM Simphony 91.3Mhz. Para quienes quieran escuchar el programa entero (con la presencia de Ezequiel Campa en el estudio) sólo deben hacer click aquí. El tema que suena al final se llama Violetas para Violeta, de Joaquín Sabina, interpretado en esta ocasión junto a La Negra Mercedes Sosa.


"Salió a la calle y no había nadie. Caminó y encontró completamente desierta la avenida abrigada bajo los cálidos rayos de un sol invernal. No comprendía lo que estaba pasando, si tan solo era un sábado más. Buscó en el kiosco, luego dentro del bar. Las puertas se abrían pero nadie asomaba siquiera para saludar. Fue hasta la otra cuadra a golpear sus palmas frente a la casa del Adrián, pero nada. Ni siquiera un perro que lo orientara con un ladrido o una mirada. "¿Dónde estarán?" Se preguntaba ya preocupado, sin entender demasiado y pellizcando su brazo para despertar. De repente un sonido llamó su atención. Un sonido lejano, desde la otra punta de este pueblo hecho con barro. Pateó casi un kilómetro sobre las polvorientas calles de tierra observando atentamente para todos lados, con el lógico miedo de afrontar lo desconocido, lo inusual. Un fuerte ruido detrás suyo lo hizo saltar, pero al darse vuelta vio un chapón caído por culpa de un pájaro que en él se había querido posar. Siguió adelante, precavido, y otra vez el sonido pudo escuchar, ahora más fuerte y más cercano que en la otra oportunidad. Provenía de la cuadra siguiente. Tomó coraje y apoyó su espalda contra las paredes para que no lo viera nadie llegar. El silencio reinaba detrás de esa puerta misteriosa que había atraído su presencia hasta acá. Sigiloso, puntilloso, apoyó sus dedos para abrir apenas y así espiar, y justo en ese momento explotó desde adentro un grito que eran varios gritos que lo hicieron saltar del susto hacia atrás. La puerta se abrió fuerte de golpe y todos los vecinos salieron corriendo a abrazarse y festejar. Era el tercer gol del Barca que hacía estallar a ésa, la única televisión del pueblo que los había reunido en esta tarde de sábado para ver a Messi brillar, cita que Jorgito había olvidado por completo en su afán de no prestar atención cuando le hablan los demás".

Violetas para Violeta

La página de sucesos
del Mercurio y La Estafeta,
entre dietas para obesos,
presos y falsos profetas,
confirmaba que sin besos
se marchitan las violetas.

Maldigo del alto cielo
que nos expropió su canto,
sus décimas, su pañuelo,
su quinchamalí, su llanto,
viola de chicha y pomelo,
cacerolas del espanto.

Habráse visto insolencia,
cinismo y alevosía,
contaminan la decencia,
secuestran la fantasía,
cuando clama la inocencia
llaman a la policía.

Lo dijo Violeta Parra,
hermana de Nicanor,
por suerte tengo guitarra
y sin presumir de voz,
si me invitan a una farra
cuenten con mi corazón.

Volaron desde Chicago
unos gringos con corbata
y en una suite de Santiago,
sin pisar Chuquicamata,
defecaron en mi pago,
sobraban las serenatas.

Más sola que una maleta
olvidada en la Gran Vía,
desde que se fue Violeta
enlutando la poesía,
se ensañan con los poetas
las faltas de ortografía.

La cuequita de mi Chile,
los listos de Guasingtón,
la marchitan con fusiles
que acribillan la razón,
malaya sean los desfiles
y el cristo que los parió.

Los pobres no somos ricos
ni el cobre es más que la greda,
la libertad cierra el pico
desde que hay toque de queda,
pregúntale a los milicos
qué hicieron en La Moneda.

martes, 17 de mayo de 2011

Participación en El Tercer Fantasma, Capítulo III

A la distancia, esquivando un piquete de algún Moyano en Madariaga, se pudo escuchar un relato mío en una voz extraña durante una nueva emisión del Tercer Fantasma. Un viaje a través del tiempo acompañando a Bob Marley durante su travesía desde el principio hasta los últimos de sus días.


"Muy buenas tardes radioescuchas del Tercer Fantasma, una vez más Keith Richards aquí presente, luego de varias semanas de andar viajando por el tiempo sin poder coordinar bien el regreso. El calendario musical indica que en una semana como esta podríamos estar festejando los aniversarios de nacimiento de Adriana Varela, Marta Sánchez, Stevie Wonder o Bono, pero en una decisión unánime (la mía) nos embarcaremos en un viaje de 30 años hacia atrás para conmemorar el día del fallecimiento de Bob Marley. Así de simple, apretamos una tecla cualquiera y…

Robert Nesta Marley Booker, conocido por todos como Bob Marley, falleció a los 36 años un 11 de mayo de 1981. Dejó de existir físicamente, pero su obra logró trascender en el tiempo de manera tal que aún hoy sus temas suenan en infinidad de hogares y continuarán haciéndolo eternamente.

El mayor logro a través de su vida fue la difusión de la música jamaicana al mundo entero, ya sea el ska como el rocksteady y principalmente el reggae, además de haber enseñado a todos la cultura Rastafari, de la cual era un miembro con gran compromiso.

Primero como líder de The Wailers y luego bajo el título de Bob Marley & The Wailers, consiguió grabar temas como “I shot the Sheriff”, “No Woman, no cry”, “Could you be loved”, “Redemption song”, más tantos otros que se transformaron en hits conformando una lista muy extensa.

Quince discos de estudio, uno de ellos lanzado dos años después de su muerte, “Confrontation”, más otro recopilatorio lanzado en 1984 titulado “Legend” que se convirtió en el álbum de reggae más vendido de la historia, con 10 discos de platino en los Estados Unidos y 20 millones de copias en todo el mundo. Datos contundentes para respaldar a este artista que luchó contra la discriminación de su pueblo y abrió puertas hasta entonces impensadas para músicos de su calibre. Incluso la prestigiosa revista Time eligió en 1999 al disco “Exodus” como el Mejor álbum del Siglo XX. Casi nada, ¿no?

Justamente “Exodus” fue el trabajo discográfico que terminó de consagrar a Marley a nivel mundial, grabado en Londres en 1977 luego de haber abandonado Jamaica tras sufrir un atentado en su propia casa. “So much things to say”, “Jamming”, “Turn your lights down low”, “Three little birds”, “One Love” y el tema homónimo al título del disco son parte de esta obra que no puede faltar en ninguna colección musical.

Una herida en el pie sufrida durante un partido de fútbol se transformó en una forma maligna de melanoma que lo acompañó desde julio de 1977 hasta el último de sus días. Marley recibió un funeral de estado (el cual recomiendo vean en youtube) que combinó elementos de la iglesia ortodoxa etíope con los de la tradición rastafari. Fue enterrado junto a su guitarra y despedido por el primer ministro de Jamaica, Edward Seaga, quien pronunció las palabras con las que yo me despido hasta una próxima ocasión:

“Su voz fue un llanto omnipresente en nuestro mundo electrónico. Sus rasgos afilados, su aspecto majestuoso y su forma de moverse se han grabado intensamente en el paisaje de nuestra mente. Bob Marley nunca fue visto. Fue una experiencia que dejó una huella indeleble en cada encuentro. Un hombre así no se puede borrar de la mente. Él es parte de la conciencia colectiva de la nación”.

lunes, 16 de mayo de 2011

Participación en Time Killer, Capítulo VII

Sucedió hace poquito más de una semana, pero entre embalajes y rutas no estuve casi nada frente a una computadora. Aquí adjunto un nuevo relato que no tiene mucho de cuento, pero entró en la sección de Cuentos Deportados emitida en Time Killer el lunes 9 de mayo, más un final Stone con su clásico Wild Horses.


"Turf. Caballos grandotes con nombres extravagantes manejados por personas diminutas, una gran cantidad de hombres que asiste al hipódromo para, una vez concluida la jornada, desconcentrarse cual hormigas a las que un patadón les sacudió el tablero, pequeños grupos que se amontonan frente a la pantalla de un televisor escondido en algún bar, con la ilusión depositada en un papelito aferrado a sus manos. Páginas enteras dedicadas al tema en secciones deportivas de diarios, que llevan una y otra vez a cuestionar si realmente es un deporte o no. Nunca lo entendí.

En mi vida conocí a nadie que fuera a ver una carrera de caballos por el simple hecho de disfrutar la vivencia, pareciera más bien que todos tienen la necesidad de ir sólo con intenciones de apuestas, para salvar la economía de la semana, el mes, quizás varios años. O arruinarla por completo. Equinos que cargan una pesada carga de personas muchas veces desesperadas. ¿Alguien les preguntó a esos hermosos animales qué sienten con todo esto? ¿No será demasiada la presión que se les coloca encima? Y no refiero al hombrecito petisito que los monta, está claro, ¿no?

¿Hasta qué punto estarán a gusto estos corceles que viven su vida fuera de su hábitat natural? Tanta incertidumbre me tenía inquieto, por eso utilicé algunos recursos para contactar al nieto de Mr. Ed, ¿lo recuerdan? Aquél caballo de la década del ’60 que poseía el don del habla. Y vaya sorpresa me llevé al entrevistar a su descendiente, que en pocas palabras respondió lo siguiente: “Me tocó estar unos meses en un stud argentino, al cuidado de un hombre chiquito que me hablaba sobre cosas intrascendentes. La verdad que me tiraban agua en todo el cuerpo muy temprano a la mañana, y me cagaba de frío. Me daban de comer una alfalfa muy mala que creo traían de China porque les resultaba más barata. Cuando quería dormir un rato siempre me ataban una soga para hacerme dar vueltas y vueltas un largo rato, nada de todo esto era agradable. Y ni te cuento cuando me cortaban el pelo de maneras ridículas indescriptibles. Me escapé, agarré la ruta 5 y llegué a La Pampa. Ahora piso yo el suelo de mi campo, otra vez el verde de la libertad. Estoy viejo, pero las tardes son mías, volví al campo, estoy contento de verdad. En un stud alejado, en una noche sin luna, alguien no cerró el candado y yo dejé la ciudad”.

martes, 3 de mayo de 2011

Participación en Time Killer, Capítulo VI

El siguiente audio corresponde a la actuación de quien aquí escribe dentro del programa Time Killer, que se emite los lunes a las 18hs por FM Simphony 91.3Mhz. El texto del mismo se trascribe a continuación, y más abajo la letra del tema "Todos y yo no" perteneciente al grupo Guasones.

Cuentos Deportados - Cap VI by SebasL

"Llegar al Autódromo de Buenos Aires, bien llamado Oscar y Juan Gálvez (célebres pilotos argentinos), es toda una odisea cuando una serie de carreras llama. No importa que sea siempre en día domingo, cuando la General Paz es una vía más despejada que de costumbre y la ciudad descansa. Es tal la convocatoria que provoca una cita de este tipo, que si uno no sale bien temprano por la mañana puede llegar a viajar durante mucho tiempo por un espacio de escaso trayecto.

Jorge, fierrero fanático si los hay, sabía muy bien esto, y desde que se enteró que el Turismo Carretera se presentaría aquí, en su provincia, se dispuso a hacer todo de manera tal de disfrutar el espectáculo en vivo por primera vez sin perderse ni el más mínimo de los detalles. Su preparación comenzó un día antes, cuando le dedicó más de cinco horas al lavado de su coche. Lo limpió tan cuidadosamente que parecía nuevito, estaba brillante. Por la tarde pensaba dormir una siesta, pero finalmente se quedó parado un rato largo al lado del auto para que no le pegaran un pelotazo los chicos que estaban jugando en la calle de su cuadra; y por la noche no quiso salir con sus amigos para descansar y comenzar bien temprano al día siguiente. Pero no durmió demasiado. A cada rato se asomaba a la ventana, creyendo haber escuchado algún ruido, y se quedaba unos largos minutos hasta cerciorarse que nadie merodeaba. Le pasó una, dos, tres veces, hasta que en la cuarta ocasión lo vio. En la vereda, oculto en la oscuridad de las tres de la mañana, sigilosamente se estaba acercando a la puerta delantera, la del acompañante. Ahí se agazapó, miró hacia ambos lados y, creyendo que nadie lo observaba, se dispuso a pegar el salto. Jorge, desesperado, no sabía qué hacer. Si abrir la ventana y pegarle un grito, si tirarle algo desde la posición en que se encontraba, o si debía bajar corriendo las escaleras y enfrentarlo cara a cara. Pero antes de tomar esa decisión, el intruso se anticipó y dio el zarpazo. Un salto de un metro y medio que le permitió a ese pequeño gato apoyar sus cuatro patas en el capot del auto ante la atónita mirada de Jorge, que llegó a abrir la ventana y quedó boquiabierto sin saber que hacer. Ido, enceguecido, cruzó su cuerpo a través de esa ventana para llegar lo antes posible a espantar al gato, como olvidándose que estaba en un primer piso y cayendo por casi cinco metros al vacío.

Los primeros rayos del sol encontraron al cuerpo de Jorge tendido en la vereda. Medio inconciente, muy dolorido, abrió sus ojos y observó que el gato ya no estaba. Tampoco el auto, ni las llaves del auto que traía en su bolsillo. Cuando intentó levantarse se dio cuenta que tenía un tobillo fracturado y un hombro fuera de lugar. Fue al rato nomás que se encontraba acostado en una sala de la clínica del barrio, pidiéndole a un enfermero que pasaba por ahí que por favor le prendiera la tele, en el canal de las carreras, que no quería perderse detalles de la serie del Turismo Carretera que, una vez más, comenzarían sin él".

Guasones, "Todos y yo no"

Mariposas rastreando marineros depravados
desasiéndose de amor masoquista.
Grandulones narcisistas encontrándose con
huecas en las discos de alta arlkurnia.
Compadritos borrachines jugando la última
carta por un trago más en la cantina.
Funcionarios negociando a través de un celular
alguna que otra treta ilegal.

Marihuanos volados estallando en carcajadas
en el interior de una patrulla.
Maridos ejemplares engañando a sus mujeres
en algún oculto hotel.
Ampones ingeniosos intentando enlazar
las piezas de un brillante plan.
Jóvenes enajenados por potentes rocanrroles
saltando los dos en un recital.

¿Por qué todos menos yo tiene algo para hacer esta noche?
¿Por qué todos y yo no? No lo puedo resistir.
Es que una mala mujer me abre una profunda herida,
me dejó como un imbécil lamentando su partida.

Jugadores enviciados entregándole sus casas
a un malvado prestamista.
Paranoicos encerrados esperando a Lucy que llegue
y les traiga de la fina.
Jóvenes politizados discutiendo sobre
una posible patria socialista.
Bolicheros descarados regateando diez centavos
a una pobre banda de Rhythm & Blues.

Policías corruptos sobornando prostitutas
al costado de alguna autopista.
Y en el baño de alguna estación de trenes dos hombres
confiesan su amor a primera vista.
Artistas delirantes esperando un poco inquietos
que una dama les de su bendición.
Mientras tanto en un boliche de la crema
Maradona está anunciando su enésimo adiós.

¿Por qué todos menos yo tiene algo para hacer esta noche?
¿Por qué todos y yo no? No lo puedo resistir.
Es que una mala mujer me abre una profunda herida,
me dejó como un imbécil lamentando su partida.

¿Por qué todos menos yo tiene algo para hacer esta noche?
¿Por qué todos y yo no? No lo puedo resistir.
Es que una mala mujer me abre una profunda herida
me dejó como un idiota lamentado.....
me dejó como un idiota lamentando.....
me dejó como un imbécil lamentando su partida.

sábado, 23 de abril de 2011

Rock, lo que se dice rock... ¡era el de antes!

La siguiente es una de las 100 anécdotas que figuran en el libro "100 veces Pappo", realizado por los periodistas José Bellas y Fernando García. Un libro caro, por cierto, de rápida lectura y seguramente infaltable para quienes disfrutamos aun hoy día de este cavernícola de la era contemporánea. Las líneas a continuación escritas fueron narradas por Botafogo en su dvd Blues Maestro, y esa imagen se puede ver haciendo click aquí.

"Fuimos a comer con Pappo y con Darío a la casa de unos mecánicos, amigos de Pappo, gente que le preparaba los autos y le arreglaba las motos. Volvimos de la cena en la camioneta de "Carla", el papá de Pappo. Era una camioneta que tenía unas defensas enormes tipo Brigada A porque la usaban para transportar calderas, que es lo que fabricaba don Napolitano. Al llegar a la Avenida Corrientes, a la altura de donde empieza, se tocó con un colectivero y le agarró un ataque. Nunca supe bien si el colectivo le pegó a él o al revés, pero la cuestión es que estábamos en un raid con el colectivero y Pappo le iba pegando de atrás con la camioneta. La gente se iba bajando del colectivo despavorida. Y lo siguió corriendo y corriendo hasta Montevideo. Y ahí el colectivero se cansó y atravesó el colectivo en la Avenida Corrientes y no lo dejaba pasar. Y Pappo se dedicó a pegarle en los costados con esas defensas, mientras el colectivo se tumbaba para los costados. Se armó un escándalo. Había 500 personas en cada esquina vivando a Pappo. Le decían: "Reventalo, reventalo que son unos turros estos colectiveros". Y yo miraba todo ese espectáculo. Empezaron a llegar los patrulleros, Corrientes cortada, era un descontrol. Lo meten a Pappo y a Darío en un patrullero y yo me metí también porque estaba con ellos, por voluntad mía. Entonces nos llevan a una comisaría. Ahí apareció un tucumano con una cabeza gigante que lo agarró de los pelos a Pappo y se escuchaban unos ruidos en el fondo de la comisaría de trompadas y gritos y cosas. Le dieron una paliza a Pappo... Justo cuando nos iba a tocar a Darío y a mí, aparece un tipo onda Kojak. Peinado a la gomina, con un traje plateado de dos mil dólares, una cosa increíble que no parecía (y no parece) real. Dice: "Vengo a buscar a Pappo, a mi amigo Pappo". Y nosotros nos dábamos cuenta por como nos miraba que no sabía ni quién era Pappo. El tipo sacó una Magnum plateada y la puso arriba de la mesa. A los gritos con el comisario, al oficial que nos estaba haciendo el acta le tiró la máquina de escribir al piso. Era una película americana... La cosa es que el tipo nos saca de la comisaría y nos lleva a Corrientes, a un restaurant griego. Entramos con el tipo este totalmente sacado, los tres atrás de él, en filita. Estaban los griegos rompiendo platos como es la costumbre y este hace parar la orquesta, toda esa fiesta que había ahí adentro. La gente se va, huían, y este le dice a la orquesta que nos den los instrumentos a nosotros. Encima se le veía el fierro asomando del saco, terrible. Va y se sienta en una silla en el medio del salón vacío y nos dice "¡Toquen!". Y le dice a Pappo: "¡Tocá esa del tren, la del tren!", y gritaba y hacía palmas. "¡Tocá... ¿cómo es? ¡La de la cerveza!". Empezamos a tocar "Fiesta cervezal" y nos mirábamos arriba de ese escenario sin entender lo que estaba pasando. En eso entró una mina, que parecía la mujer de él, y empezaron a discutir. Y veo que le pone el chumbo en la frente y le gritaba y nosotros tocando con esa escena... Entonces dice: "¡Basta, vengan conmigo!". Y lo seguimos con la camioneta hasta un barcito cerca de la cancha de River. A todo esto, se habían hecho como las cinco de la mañana. El tipo estaba borracho y duro como un tablón y le pidió a Pappo que tocara "esa del piano". Y Pappo se puso a tocar solo "Desconfío" en un piano desvencijado que tenían. Cuando vi que el tipo dio el primer cabezazo enfilé para la puerta y empecé a correr hasta Monroe, y de ahí a mi casa sin parar..."

martes, 19 de abril de 2011

Aplausos genuinos

Ayer salimos de paseo con Tomy y pasamos por el Tren de la Costa en San Isidro, donde tiene los nuevos estudios FM Simphony. Allí acompañamos la transmisión de Time Killer, tal como publiqué en el post anterior, disfrutamos la compañía de buena gente amiga y luego volvimos al auto. Camino a la búsqueda de un nuevo libro por comprar, encendí la radio y juntos escuchamos la cadena nacional que nuestra Presidente Cristina Fernández (gran oradora por cierto) brindó al pueblo argentino. No solo me llamó la atención el final en el que citó a Joaquín Sabina con su frase "que ser valiente no salga tan caro, que ser cobarde no valga la pena", sino que también me causó asombro escuchar a Tomy, con su año y tres meses, aplaudir con fuerza y sonrisas cada vez que el público (¿genuino?) aplaudía en el acto en cuestión. Luego la cadena finalizó, Sebastián Wainraich y Julieta Pink volvieron a la tira habitual de Metro y medio y el niño siguió aplaudiendo y sonriendo, lo cual me dejó algo más tranquilo al permitirme pensar que todavía no distingue demasiado los discursos y que, aunque será libre en sus decisiones y elecciones, en política por unos años no se interesará.

Participación en Time Killer, Capítulo V

Una nueva participación en Time Killer por FM Simphony 91.3Mhz. En esta ocasión, una poesía futbolera acontecida en un viejo potrero perdido por ahí. Para seguir el programa, click acá, y para escuchar el último episodio, acá.





Cuentos Deportados - Capítulo V by SebasL

"Hoy al cuento me animo a traerlo en forma de poesía, una historia de un partido histórico del barrio San Pedrito. Música maestro...

Jugado por jugado,
perdido por perdido,
así estaba Juan Pablo,
el arquero, decidido.

Nunca pensó nadie
que acontecería lo acontecido,
una sorpresa sorpresiva
con destinado destino.

Fue a minutos del final,
con el empate clavado,
que si ese gol era recibido
el empate sería derrotado.

Por eso Juan Pablo salió
con los pies hacia delante,
y sus patas dieron la patada
que provocó el disparate.

Un rival partido al medio
en el partido decisivo,
y al arquero los rivales
le partieron los incisivos.

Una batalla campal
en el campito del barrio,
donde el orgullo era el trofeo,
el tesoro más preciado.

Pero el final fue distinto
al sueño soñado por Juan Pablo,
que pagó un precio caro
por ese trofeo preciado,
y terminó clavado su orgullo
en la cárcel encarcelado."


Y a continuación, el tema de Las Pastillas del Abuelo titulado "Me juego el corazón", que dice así:

"Todavía no echan raíces
y ya vas en busca del sol,
puede ser fuerte el topetazo
de querer cantar un blues
y no saber que es un bemol.
Con alas de oro, no se puede volar.

Correrme de la parte más oscura
boicoteadora que hay en mi,
no es soplar y hacer botellas, no,
pero no quiero a ese cobarde
que dice todo que sí.

Insomnio tiene el que no está durmiendo
con el campeón que habita en sí.

Y puede ser más fácil el ruido de las nueces,
treinta velas al orgullo y raticida a la humildad,
puede ser más fácil desconfiar de un jet´aime
para no tener que afrontar el desafío Carpe diem.

Si para recobrar lo recobrado
debí perder primero lo perdido,
si para conseguir lo conseguido
tuve que soportar lo soportado,
si para estar ahora enamorado
fue menester haber estado herido,
tengo por bien sufrido lo sufrido,
tengo por bien llorado lo llorado,
porque después de todo he comprobado
que no se goza bien de lo gozado,
sino despues de haberlo padecido,
porque después de todo he comprendido
que lo que el árbol tiene de florido
vive de lo que tiene sepultado.

¿Cuántas caricias recibís al día por cagar más de lo normal?

La imitación es el peor suicidio
teniendo en cuenta que morir nos vamos a morir igual.
Morir en vida es tan absurdo, viejo, no, como esperar lo natural.

Como la abeja pica y muere obedeciendo a la natura,
mis entrañas se van en cada canción.
Y yo no creo en ese cuento del destino.
¿Qué es lo malo y qué es lo bueno?
Soy buen hombre y ya me juego el corazón."

martes, 12 de abril de 2011

Participación en Time Killer, Capítulo IV

Algunos contratiempos hicieron que mi semana anterior no haya sido demasiado creativa, pero finalmente pude acompañar a Julián, Paula y Gustavo en el estudio de FM Simphony en una nueva emisión de Time Killer. Brevemente pude relatarles cómo maté el tiempo durante mi domingo libre, y así surgió el audio que aparece a continuación. (Click aquí para escuchar el programa entero).


“Ayer domingo, día ideal acorde a la temática de este programa, me desperté con la alegría de tener por delante muchísimo tiempo para matar. Ninguna nube en el cielo, temperatura primaveresca, clima ideal para hacer lo que debíamos hacer en una jornada no laboral.

Diez y cuarto de la mañana. Subí al auto, puse un disco de grandes éxitos de Maná y me fui a buscar a mi familia, ya que habíamos dormido en casas separadas (vieron como es esto de los matrimonios modernos, no?). Cuando llegué desde Florida a San Isidro me enteré que teníamos que llevar un paquete a… Florida, motivo por el cual tuve que recorrer inversamente el camino realizado minutos atrás para cumplir la primera misión.

Once de la mañana. Paquete misterioso entregado (todo legal, vale la aclaración). Recordé que tenía que comprar el remedio para mi dolor de oído que se había acabado la noche anterior. El remedio, no el dolor de oído. Pasamos por una, dos, tres farmacias, todas cerradas. Recién en la cuarta, también con la persiana baja, encontramos el cartelito que decía cuál de ellas estaba de turno, entonces dimos las últimas vueltas y desembocamos en el lugar deseado.

Doce y cuarto del mediodía. Tomé el antibiótico y subimos a la autopista Panamericana. A paso pesado entre mucho conductor dominguero, pero a la vez esquivando a los que veía venir a través del espejo retrovisor a mucha pero mucha velocidad, viajamos hasta Ingeniero Maschwitz, donde celebramos el cumpleaños de mi madre, que ya acumuló varias juventudes y llegó a los 60. El reloj marcaba las 13.

Entre sobrinos correteando por todos lados, sandwichitos de carne asada, pedazos de tortas que justifican esta panza y más sobrinos corriendo por todos lados (entre paréntesis, nunca dude en alquilar un castillo inflable si tiene más de cinco niños en la casa), se pasó una tarde que además de placentera resultó agotadora, y entonces emprendimos el regreso.

Siete y veinte de la tarde. Retomamos la autopista Panamericana y, tras superar el peaje a la altura de la Ford, nos encontramos con una marea de lucecitas rojas de coches detenidos que indicaban que el camino a casa podía ser tan lento como el programa de limpieza del Riachuelo. Pero no se preocupen, no fue tan grave, una hora y cuarenta minutos más tarde habíamos concluido el trayecto… que en un día de tránsito normal no hubiese llevado más de media hora.

Ahí fue cuando recordé el mail que había leído a la mañana temprano, que decía que hoy nos encontraríamos acá en el estudio y que podíamos traer algo para compartir sobre nuestros tiempos libres. Se me ocurrió que haber pasado cuatro horas y veinticinco minutos de mi domingo libre manejando era algo que lejos estaba de lo que había soñado, y quería compartirlo con ustedes junto al disco de Maná, que nunca saqué del auto y todavía está en mi cabeza sonando…”

viernes, 8 de abril de 2011

Participación en Time Killer, Capítulo III

El siguiente audio pudo apreciarse el último lunes durante la emisión de Time Killer por FM Simphony 91.3Mhz. Con la conducción de Julián Harf y la compañía de Gustavo Lombardo, Paula Alejandra Lastra y quien aquí escribe, un programa para entretenerse en sus ratos libres... Más abajo transcribo el texto de la sección Cuentos Deportados en cuestión, un caso real cuyos protagonistas llevan otros nombres para preservar su identidad.

Cuentos Deportados - Capítulo III by SebasL

"Fumaba ansioso en la sala de espera, época aquella en que los partos no eran presenciados por los padres y entonces los nervios ganaban en el terreno de la incertidumbre. “Lo felicito, es un varón”, fue lo primero que escuchó cuando el médico salió a través de la puerta, y entonces Alejandro se distendió y emocionó. Pasaron los minutos y una vez dentro del cuarto de aquél hospital la pareja observó con dulzura a Franco, el primero de los tres hijos que el tiempo y la vida les brindaría. Carlos, un amigo del club que estaba casi tan ansioso como la familia misma, se hizo presente enseguida para felicitar a los flamantes papás y ella le agradeció el tierno gesto de acercarse hasta allí tan pronto había recibido la noticia. Claro que todo no podía ser tan perfecto, entonces la sorpresa llegó. Fue al ratito nomás cuando Carlitos miró a Alejandro, le hizo el gesto que acompaña al “Bueno, ¿vamos?”, y entonces Ale le dio un beso en la frente a su mujer, pasó la mano sobre la cabeza del recién nacido y sacó un bolso que se encontraba debajo de la cama. Allí adentro tenía el conjunto deportivo para cambiarse y la raqueta para afrontar el desafío, un torneo de tenis interno que el club había organizado, y que dejaría solos a madre e hijo por el resto del día y con el obligado llanto de la primera noche."

lunes, 28 de marzo de 2011

Conclusiones domingueras

Fueron tres momentos los que marcaron mi día de descanso, además del exquisito asado en familia disfrutado. Por un lado, indignado por el bloqueo al diario Clarín, porque como expresaron muchos periodistas de diversos medios, en un país que celebra vivir en estado de democracia la libertad de expresión debe ser respetada. Y no sé cuánto puede haber afectado también esto a cantidad de trabajadores que alistados en sus kioscos de diarios esperaron en vano y perdieron parte de sus ingresos económicos en un día clave para ellos. No hay mucho por agregar a esto, la situación habla por sí sola.

Por otra parte, entre las cartas de lectores del diario La Nación encontré esto que transcribo a continuación: "Agradezco que me permita utilizar este prestigioso medio para hacerle llegar este pedido al compañero Hugo Moyano. Estimado compañero, le pido por favor que no haga ningún paro, no sea cosa que la gente piense que lo hace para que no lo investiguen por el tema de Suiza: no hay que darle que hablar a la gente malintencionada. Ya sabe que se anda diciendo que usted es dueño de empresas, que tiene varias propiedades, y hace un tiempo algún amigo oligarca me envió un mail en el que se le adjudicaba la compra de un campo en la provincia de Buenos Aires. Por eso, compañero, pida que lo investiguen y así verán estos charlatanes que un líder sindicalista como usted vive de su salario y pensando en nosotros, los trabajadores; eso sí, le pido que les dé un tirón de orejas a esos gremialistas que cuando los van a detener por habérseles escapado algún que otro troquel, o por la posible participación en un asesinato, los encuentren en un departamento de un millón de dólares. Compañero, está en usted demostrarles a esos parlanchines su moral, su honestidad y su impoluta trayectoria y la de su entorno familiar". La misma fue firmada por el Sr. Arq. Jorge Robbio (jr@arqrobbio.com.ar) y simplemente me pareció genial.

Por último, una breve extracción de la novela "El hombre que amaba a los perros", cuyo autor es Leonardo Padura y en la cual narra la historia sobre el asesinato de Trotski en una forma muy atrapante (al menos para quien aquí escribe). Es una parte en la que Iván, uno de sus protagonistas que a su vez es ciudadano de una pobrísima Cuba en crisis de los '90, vuelca un concepto que la vida le fue impregnando: "... había aprendido que la verdadera grandeza humana está en la práctica de la bondad sin condiciones, en la capacidad de dar a los que nada tienen, pero no lo que nos sobra, sino una parte de lo poco que tenemos. Dar hasta que duela, y no hacer política ni pretender preeminencias con ese acto, y mucho menos practicar la engañosa filosofía de obligar a los demás a que acepten nuestros conceptos del bien y de la verdad porque (creemos) son los únicos posibles y porque, además, deben estarnos agradecidos por lo que les dimos, aun cuando ellos no lo pidieran".

viernes, 25 de marzo de 2011

Inestable

Con ganas de todo y ganas de nada. La cabeza en infinidad de cosas y las patas estancadas. Buscando la flecha indicadora con la luz apagada. ¿Esperanzado o desilusionado? ¿Estará mal que se aburra al leer los diarios? ¿Hay elecciones este año? ¿Quiénes son los candidatos? Nunca termina de comprender si vamos por buen camino o si otra vez desbarrancamos. ¿Al final hay que ser individualista o está bien intentar ser solidario? Sigue con la suya, disfrutando a quienes lo cultivan y le arrancan sonrisas e ignorando a los malhumorados. Tiene un proyecto, se acortan los plazos, sabe que otra página en esto que llaman vida está por pegar la vuelta, y eso enciende el motorcito que lo conduce a seguir andando.

miércoles, 23 de marzo de 2011

Participación en El Tercer Fantasma, Capítulo II

El siguiente audio fue extraído del programa El Tercer Fantasma en su emisión del día martes 22 de marzo de 2011, con la conducción de Gustavo Pagani y la participación de quien escribe. Debajo podrán leer el texto referido a la sección en cuestión.


"Muy buenas tardes radioescuchas del Tercer Fantasma, los saluda Mick Richards, el encargado de llevarlos hacia atrás en el tiempo del mundo de la música. Nos encontramos en el mes de marzo, recibiendo al otoño por estas latitudes, época en la que sucedieron acontecimientos como los que mencionaremos a continuación:

Año 1944, nacimiento de Diana Ross; en 1947 llegaba al mundo Elton John y 12 meses más tarde el que sería líder de Aerosmith, Steven Tyler. El 22 de marzo del ’63 sale el primer álbum de los Beatles, Please, please, me, y para la misma época pero en 1969 se casaban en Gibraltar John Lennon y Yoko Ono, con todo lo que eso implicaría.

Pero la opción a la que nos transportaremos hoy tiene como destino el año 1950, y la ocasión que nos convoca es el nacimiento de Roger Hodgson, ¿me acompañan fantasmas?

21 de marzo de 1950 en Portsmouth, Inglaterra, llega al mundo Charles Roger Pomfret Hodgson, quien se destacaría como tecladista, guitarrista y bajista, pero por sobre todas las cosas cantante, consagrándose desde muy chico al frente de una banda de rock progresivo llamada Supertramp.
Roger Hodgson tenía 17 años cuando adquirió un teclado barato que le vendió un vecino en la ciudad de Oxford, y fue a esa edad que compuso dos clásicos que quedarían en la historia de la música mundial: Breakfast in America y The logical song.

Fue en 1969, sí, a sus 19 años, cuando formó Supertramp, grupo que dejaría una huella de dinosaurio hasta su disolución en 1983. A las canciones antes mencionadas hay que sumar los temas Dreamer, It´s rainning again, Fool’s Overture y Give a little bit como los imprescindibles para conocer a la banda.

A partir de 1984, Hodgson inició una carrera independiente que se vio interrumpida casi por diez años debido a un accidente en el que se fracturó sus dos muñecas, pero que lejos estuvo de bajarlo de los escenarios. In the eye of the storm, Hai Hai y Open the door conforman su discografía en carácter de solista, presentados en diversas giras alrededor del mundo. Además supo colaborar para el grupo Yes en la realización de su álbum Talk, y participó en la gira titulada Ringo Starr and his All-Starr Band de principios de este siglo.

Fue en 2009 la última vez que pudimos apreciarlo por nuestros pagos, cuando un colmado teatro porteño Gran Rex lo ovacionó de pie. Ayer, lunes 21 de marzo de 2011, Roger Hodgson celebró sus 61 años de edad y nosotros, en este segmento fantasmal, lo acompañamos de la mejor manera posible, escuchando una versión en vivo de Breakfast in America…"

martes, 22 de marzo de 2011

Participación en Time Killer, Capítulo II

Segunda aparición de la sección Cuentos Deportados en el programa Time Killer. Relatos que relacionan a los deportes y la gente que los practica en sus tiempos libres, y las cosas que éstos son capaces de hacer con tal de llevarlos a cabo. ¿Que todavía no escuchaste el programa? Los lunes a las 18hs por FM Simphony 91.3Mhz.


"Agua de lluvia. Bendición para el trabajador de la tierra al cual alegra en sus cosechas. Aroma renovador en toda jungla de cemento cuando sus primeras gotas llegan al verde cesped de jardines y veredas. Caricias sobre los rostros cuando con su frescura combate al calor que acecha en sus grados más altos. Agua de lluvia. Capaz de transformar paisajes decorando el horizonte con cortinas o dibujando un arco de colores. Capaz de limpiar heridas superfluas de tan solo cubrir con su manto el cuerpo de un ser humano. Capaz de despertar sentimientos que de no refrescarse habían quedado dormidos con el tiempo. Agua de lluvia. Que puede inundar ciudades en tan escasos minutos, y provocar que María, Cecilia y Juan Carlos terminen haciendo footing dentro de un tres ambientes, acomodando el amueblado de manera tal que el circuito sea lo más digno posible e intentando no despertar a Pablo, que a las siete de la mañana recién había regresado de su horario nocturno de trabajo".

martes, 15 de marzo de 2011

Participación en Time Killer, Capítulo I

El audio que acompaña este post pudo ser apreciado en el segundo programa de Time Killer, emitido en FM Simphony 91.3Mhz el lunes 14 de marzo de 2011, con la conducción de Julián Harf y la participación de quien escribe. A continuación podrán leer el texto del cuento en cuestión.


"Era dorado, según le dijeron alguna vez enchapado en oro. Ya había perdido casi todo el domingo buscándolo, y ahora llevaba más de una hora desde su regreso del trabajo y no podía encontrarlo por ningún lado. Dio vuelta la mesita de luz, sacudió las sábanas de la cama, revisó cada centímetro del suelo de la habitación… Y nada. Abrió la puerta bruscamente y con la paciencia totalmente agotada acusó a su hermana a los gritos, pero ella se defendió con un tono aún más fuerte. Ahí fue cuando se metió la madre para intermediar, para calmar las aguas como quien dice. Pero con la bronca que tenía él encima, le contestó mal a la vieja y chau, se terminó de pudrir todo. Porque la señora tiene su carácter también, entonces se le salió la cadena. Voló un sopapo que no llegó a destino, se oyeron gritos irrepetibles, frases que rara vez se podrán escuchar nuevamente. Un florero cayó al piso desde la mesa del pasillo, esa mesa que se corrió unos centímetros entre tanto revoloteo y ahí… Ahí al costadito del lugar que ocupaba una de las patas de la mesa brilló algo dorado. A Sergio se le iluminaron los ojos y esquivando manotazos y gritos se zambulló y alcanzó el arito perdido. Se levantó, miró a su hermana y a su vieja con una sonrisa que lejos estuvo de ser devuelta y salió corriendo para la canchita. Se puso el aro en su oreja izquierda y le dijo a Pablito, su amigo que arrancaba la noche del lunes en el arco, que se quedara tranquilo que en los últimos cuatro partidos la cábala nunca había fallado".

martes, 8 de marzo de 2011

Participación en Time Killer, Capítulo 0

Este lunes 7 de marzo comenzó un nuevo ciclo en FM Simphony llamado Time Killer, en el cual participo en la realización de un segmento del programa. Bajo el título Cuentos Deportados, consiste en la narración de breves historias cotidianas que se relacionan de alguna manera con el deporte amateur, ese que practicamos en nuestros ratos libres y por el cual hacemos cosas impensadas con tal de llevarlo a cabo. Con la conducción de Julián Harf y la participación de Paula Lastra, Gustavo Lombardo y quien escribe, aquí pueden escuchar el primer capítulo y saber de qué se trata, para luego agendarse todos los lunes a las 18hs. y estar presentes al momento de la emisión (click acá).

miércoles, 2 de marzo de 2011

Participación en El Tercer Fantasma, Capítulo I

El siguiente audio fue extraído del programa El Tercer Fantasma en su emisión del día martes 1º de marzo de 2011, con la conducción de Gustavo Pagani y la participación de quien escribe. Debajo podrán leer el texto referido a la nueva sección que aquí se presentó.

El Tercer Fantasma - Mick Richards - Capítulo I by SebasL

"Muy buenas tardes radioescuchas del Tercer Fantasma, les doy la bienvenida a una nueva columna de las tantas que se encargan de sostener a este programa. Mi nombre, Mick Richards, soy un viajero en el tiempo del mundo de la música y aquí los invitaré a viajar hacia alguna fecha que por alguna particularidad haya dejado una huella en la historia del rock.

Tenemos la opción de viajar hacia atrás en el tiempo. Nos tomamos de las manos junto al fantasma y en una primera semana del mes de marzo hay dos alternativas posibles a las cuales los puedo transportar:
- Si aprietan la primera tecla llegaríamos al 5 de marzo de 1998 y así podríamos evitar el divorcio entre Mariah Carey y Tommy Mottola.
- Si optan por la tecla B regresaríamos al 2 de marzo de 1942 para revivir el nacimiento de Lewis Allen Reed.

¡Buena elección Homero!

2 de marzo de 1942, Freeport, Long Island, New York. Lewis Allen Reed en realidad se hizo famoso bajo el nombre de Lou Reed, esta semana está celebrando sus 69 años y es considerado uno de los padres del rock alternativo, primero como líder del grupo The Velvet Underground, una banda que no alcanzó popularidad comercial pero es considerada de gran influencia en la cultura under, y luego con una carrera solista extraordinaria que incluye 21 discos de estudio y otros tantos en vivo y en directo.

Para empezar a conocer a Lou Reed es necesario aclarar que desde joven estuvo abocado a la literatura, por eso declaró en los inicios de su carrera musical que uno de sus objetivos sería “traer la sensibilidad de la novela a la música rock”. Así, en varios de sus trabajos discográficos se pueden encontrar letras de temas que llevan una correlación entre sí, con la presencia incluso de Allen Ginsberg, Jean Genet y Edgar Allan Poe como algunos de los escritores en los que Reed se apoyó para la realización de su obra.

Durante los primeros años se dedicó a escribir y cantar acerca de las drogas, con temas como Heroin o Perfect day, que tiempo después sería incluido en la banda sonora de la película Trainspotting. Walk on the wild side es otro de sus hits que no pueden dejar de ser mencionados. Con producción de David Bowie, relata una historia de encuentros con transexuales, prostitutas, temas tabú para los principios de los ‘70 que de todas maneras logró un lugar de difusión importante en las radios. Fue con su álbum New York que alcanzó gran éxito denunciando en sus letras los peores rasgos de la ciudad en cuestión, y hasta atacando al mismísimo Papa Juan Pablo II.

Durante los últimos diez años publicó los discos Ecstasy, The raven y Hudson river wind meditations, además de colaborar con The Killers en su tema Tranquilize y con Gorillaz en Some kind of nature.

Rock experimental, a veces denso y deprimente, mucha distorsión. Canciones extensas con varios cuelgues, un nombre que ya está registrado en la historia de la música y que esta semana celebra su cumpleaños número 69. Me despido hasta un próximo encuentro y los dejo regresar al presente con El Tercer Fantasma, pero no sin antes escuchar Satelite of love, un clásico de Lou Reed…"

sábado, 26 de febrero de 2011

Motocicletas e imprudencias

La moto en marcha, el hombre en su casco y detrás... la novia, mujer, madre sin protección alguna. O peor, en el medio de ambos un chico o una chica de poquitos años que a veces disfrutan en su inocencia del viaje y otras se agarran con cara de susto permanente. Situación que aparece con frecuencia frente a mis ojos y la indignación que crece. ¿Necesitan un control policial que los detenga y advierta sobre el peligro al que se exponen? Porque si se los dice uno cualquiera se enojan, se justifican vaya uno a saber con qué argumentos, y siguen su rumbo conformes a una respuesta sin goyete (si la expresión se me permite). "A mi no me va a pasar", pensamos todos, hasta que pasa...

miércoles, 23 de febrero de 2011

Días de radio

Con algunas de las personas que leen el blog nos conocemos más, con otras menos, lo cierto es que quería compartir con todos que luego de algunos años al frente de diversos programas radiales, este 2011 me encuentra en una posición diferente. Como decidimos en familia dejar atrás la gran ciudad y buscar nuevos horizontes, opté por no iniciar la temporada en ninguna emisora local. Pero por supuesto me resulta muy difícil mantenerme al margen de algo que tanto me apasiona como lo es hacer radio, entonces aquí el quid de la cuestión de este post. A partir de marzo nos podemos volver a encontrar al aire en FM Simphony 91.3Mhz gracias al lugar que dos amigos del medio me están brindando.

Por un lado, los martes a partir de las 19hs. me sumo a la emisión de El Tercer Fantasma (facebook), con la conducción de Gustavo Pagani (no, no es pariente del Horacio del Grupo Clarín). Un programa dedicado íntegramente al mundo de la música y en el cual los invitaré a viajar a través del tiempo, hacia alguna fecha que por alguna particularidad haya dejado una huella en la historia del rock.

Y por otra parte, los lunes en el horario de las 18 llegará Time Killer (facebook, blog), con la conducción de Julián Harf (como ya entré en confianza le dijo Juli). La temática girará en torno a diversas actividades que realiza el ser humano durante su tiempo libre, es decir, para matar el tiempo. Mi participación aquí estará plasmada en la sección "Cuentos deportados", dedicada a relatar breves cuentos relacionados en alguna manera al deporte amateur que practicamos nosotros, los no profesionales, y que escribiré y saldrán a la luz con mi voz de locutor… o algo así.

Una vez emitidas las secciones al aire iré publicando en este espacio los escritos de cada semana, espero se sumen y acompañen en ambos ciclos, porque al que escribe, hace radio o se expresa de la forma en que fuere siempre le gusta saber que alguien está, de alguna manera, recepcionando y participando del otro lado.

miércoles, 16 de febrero de 2011

Expresión creativa

Decía ser artista, aunque los críticos opinaban que sus obras más bien eran “sobras del arte”. Tenía el taller ubicado en el barrio de La Paternal, al cual intentar ingresar en las últimas semanas resultaba complicado. Este hombre de unos 60 años primero se hizo conocido porque era vecino del músico Norberto Napolitano, Pappo, que en muchísimas ocasiones mencionó su nombre y hasta le dedicó un tema que nunca fue grabado. Luego tomó trascendencia pública el día que los noticieros se acercaron hasta su puerta y él salió como testigo de un choque de colectivos fulero, si hasta zafó de un interno de la 166 que casi se mete dentro de la casa. Otra vuelta también ocupó las tapas de los diarios al realizar una huelga de hambre encadenado a la puerta de la Casa de la Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, por considerar que merecía recibir un subsidio para presentar en Europa unas muestras hechas con chatarra, pero la ayuda económica nunca llegó y terminó unas horas preso por morderle un sandwich de milanesa a un muchacho que pasaba caminando. Ahora hacía tiempo que no llamaba la atención, hasta que los vecinos de la cuadra convocaron a los medios e iniciaron un escrache con cacerolazos. Intentar ingresar a su taller resultaba complicado. Ni siquiera la policía logró adentrarse en aquellas instalaciones en un primer tanteo. Es que en esta ocasión había transgredido ciertos límites. Fue a causa de una de sus recientes inspiraciones que lo llevó a armar una estructura de hierros cruzados que tenía frutas y hortalizas incrustadas por todos lados. Muy colorido en un principio, cuando las altas temperaturas dentro del galpón con techo de chapa hicieron efecto, las diferentes especies literalmente se pudrieron con un consecuente efecto hediondo que alcanzaba un radio de trescientos metros. “El árbol de la vida” lo había titulado, aunque paradójicamente tenía un olor a muerto difícil de ser asimilado. Problemas que surgen al tener el arte un concepto de interpretación tan amplio.

viernes, 11 de febrero de 2011

Admiración

Pisó fuerte los frenos cuando la luz cambió bruscamente al amarillo para pasar enseguida al rojo, quedando a unos centímetros de la parte trasera de aquella moto.

- ¡Linda nave! - dijo el conductor.
- ¿Linda? ¡Hermosa! Mirá lo que es eso... - lo siguió el acompañante.
- Me llego a subir ahí un ratito nomás y me puedo morir tranquilo.
- No, si me subo yo no me bajo en mi vida, ni que me ofrezcan... no sé, lo que se te ocurra.
- Sabés lo que debe ser eso, no te olvidás más si llegás a probarla.
- Yo llego a tener algo así y me voy para todos lados, para mostrarla nomás, para que me vean ahí al ladito.
- Eso seguro, con lo agrandado que sos vos, si conseguís una como esa no entrarías por ninguna puerta...
- ¡Más vale! Inflo el pecho y me paseo de acá para allá, está bárbara, en mi barrio no hay de esas.
- ¿Sabés lo que pasa? Debe salir una fortuna mantenerla, no son baratas las de este tipo.
- En eso tenés razón... Está bien, dámela un ratito nomás, después que la mantenga otro.

Un minuto pasó y la luz cambió al amarillo para dar lugar al verde. La silueta de esa hermosa mujer sentada en la parte trasera de la vieja moto desvencijada se alejó lentamente por la avenida, mientras ambos compañeros se quedaron imaginando el rostro que tendría esa nueva efímera fantasía.